Eclipse solar. El Sistema Solar a simple vista

En la imagen vemos un eclipse solar parcial a través de un filtro de protección. Es otro de los fenómenos del Sistema Solar que podemos disfrutar a simple vista, pero jamás a ojo descubierto.

Mirar un eclipse solar sin protección, aunque sólo sea por un instante, puede producir graves daños en la retina, temporales o permanentes. Tampoco sirven radiografías, negativos, gafas de sol u otros "remedios" populares. La lesión que la alta intensidad de luz y radiación produce en el ojo es indolora y podemos no darnos cuenta hasta horas después, cuando ya no tiene solución.

También si empleamos un telescopio hay que implantar un filtro en el extremo exterior del tubo y asegurarlo para que no se mueva durante la observación. Otra posibilidad es proyectar con una lupa la imagen en una lámina blanca, aunque no resulta tan espectacular.

Se produce un eclipse solar cada vez que la Luna se sitúa entre el Sol y la Tierra en el mismo plano eclíptico. A lo largo del año podemos ver varios eclipses solares parciales. Los eclipses totales de Sol son menos frecuentes.

◄ Anterior		Siguiente ►
Venus al amanecer		Sol de medianoche